martes, 14 de octubre de 2008

Laika

Hoy me enteré de un suceso muy triste que ocurrió hace casi 51 años (de hecho serán 51 años en pocas semanas) y que me dejó muy consternado, molesto, irritado y deprimido el resto del día. El 3 de noviembre de 1957 el satélite soviético Sputnik-2 fue lanzado al espacio con Laika, la famosa perra (de la que particularmente nunca había escuchado nada) que murió apenas 7 horas después del lanzamiento a causa del calor y el pánico que sentía.
Los investigadores rusos SABÍAN que la pobre Laika no iba a soprtar el viaje, y SABÍAN que la misión no iba a arrojar resultados esclarecedores, sin embargo decidieron seguir con el proyecto, gastando una cantidad inmensa de dinero y sacrificando un pobre animal que ni arte ni parte tenía en las locuras del ser humano.
Mucha controversia surgió con lo sucedido, y de hecho no fue sino hasta el 2002 que se supo lo que ocurrió con la pobre Laika, ya que los investigadores no lograban ponerse de acuerdo con que versión dar; algunos dijeron que Laika había sobrevivido cuatro días, otros incluso más.
Lo más cumbre es que todo estaba premeditado: Como ya sabían que Laika no sobreviría el viaje decidieron envenenar las reservas de comida del animal del décimo día de expedición, cuando se acabaría el oxígeno, así evitarían el sufrimiento del animal, pero que considerados, ¿No?, ¡Tanta bondad me confunde! ¿De cuando a acá?. Sin embargo Laika no pudo llegar al décimo día y ser envenenada, ya que la habían enviado en un satélite pésimamente construido y negligentemente presurisado, lo que aceleró su deceso.
Esto nos demuestra lo urgidos que estan los científicos en buscar soluciones a los problemas imaginarios que nadie tiene, !Ique por el bien de la humanidad, por favor!, si lo que les preocupa es no tener un lugar al cual mudarnos cuando este planeta se acabe entonces la solución es muy simple: En vez de intentar ser Dios, busquen soluciones a los problemas de la contaminación, del calentamiento global, del deshielo en los casquetes polares..., eso ayudaría a evitar que el mundo se autodestruya, y estoy seguro que tienen tanto las herramientas cono la capacidad para desarrollar una solución, pero ellos buscan la manera dificil de hacer las cosas, is their way or the highway.


Oleg Gazenko, uno de los líderes de la misión dijo en el año 2002 lo siguiente: Cuanto más tiempo pasa, más lamento lo sucedido. No debimos haberlo hecho....ni siquiera aprendimos lo suficiente de esta misión, como para justificar la pérdida del animal.
Y con eso ya se lavaron las manos, después de cincuenta y pico de años ahora si se arrepienten, y ahora a seguir buscando maneras inútiles de resolver las cosas. A ver si dentro de quince o veinte años deciden buscar un elefante para que arrive por primera vez a Saturno, porque de verdad, no aprendieron nada de esa lección.
Pobre perra, que vida tan horriblemente truncada, con sólo 3 años de vida fue puesta en ese aparato que acabaría con su existencia, hubiese podido llegar a diez o quince años como perra callejera en Moscú, y hubiese sido más feliz. Bueno, por lo menos espero que lo que dice la canción de Mecano con respecto a tan noble animal sea cierto: En la tierra hay una perra menos, y en el cielo una estrella más.



Laika. 1953-1957. R.I.P

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